sábado, 28 de marzo de 2015

Diario del Doctor CLOCK por Gladys Cepeda




Las puertas eran enormes se podrían apreciar cuando lograban abrirse a pesar de ser tan pesadas ,el hall señorial y antiguo llevaba la soledad como signo presente,entre penumbras y olor a humedad con sus grandes cristales y sus pisos de maderas frías y crujientes ,ellos agotados ante el inmenso camino recorrido ,por el sendero hacia el caserón que parecía abandonado decidieron darse tiempo .El atardecer con su llovizna lenta pero invasiva ,les quito la voluntad ,una mesa que parecía interminable sobre uno de los rincones lucia arreglada como para un gran festejo ,sobre ellas bandejas con frutas de apariencia apetitosa ,que ellos comen sin perder tiempo ,El sopor los induce a caer en un mundo desconocido ,garras tensas de esas larvas infectas caen sobre cada uno y los arrastran hacia la devastación …..


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